El jardín del Olivillo, de Felipe Abarzuza

La pintura gaditana de la primera mitad del siglo XX se mantuvo dentro de un estricto realismo con la aceptación de las técnicas impresionistas de ejecución y colorido.

Justo Ruiz Luna (1865-1926) es un buen autor de marinas, que adquirió gran fama en Cádiz como decorador de barcos de la Compañía Transatlántica; en su "Puesta de Sol" se refleja la versión gaditana de los estudios atmosféricos del pre-impresionismo británico.

Felipe Abarzuza (1871-1948), discípulo de Sorolla, reconocido como el mejor artista gaditano de la primera mitad de nuestro siglo, es un buen exponente de la aplicación de los modos impresionistas al costumbrismo local. En el "Jardín del Olivillo" destacan sus progresos en el studio de la luz y el color aplicados al jardín de su propio estudio en Cádiz.