| Foto: © Archivo CadizNet Custodia de mediados del s. XVI. Iglesia de San Miguel | | En Jerez trabajaron numerosos plateros, por tanto la traída de obras desde Sevilla fue escasa. Sin embargo, el corto número de piezas de la época que se conservan, y la difícil identificación de su autoría, hacen que este campo quede aún muy desconocido. Con las artes textiles sucede algo parecido. Se sabe que desde 1560 en adelante se establecieron en Jerez varios bordadores que llenaron de obras la ciudad y todos los pueblos de los alrededores. La fragilidad de los tejidos, lo que ha influido en que no se conserve casi ninguno de aquellos tiempos, y la ausencia de un estudio en profundidad de la materia, hace que se tenga un gran desconocimiento de este arte. Sí quedan en las iglesias numerosas muestras de cerrajería, sobre todo en rejas que servían de cerramiento a capillas privadas. La estética de estas obras es más bien retardataria, aunque de buena calidad. De entre los maestros que trabajaron en Jerez, cabe destacar la figura de Blas de la Pascua, cerrajero sevillano, de mediados del XVI, autor de la reja de la Capilla de los Ribadeneira en el claustro mayor del Convento de Santo Domingo. |