Bajando la Cuesta de Belén, a espaldas de los jardines del Palacio de los duques de Medina Sidonia y adosada al muro, se encuentra esta obra inconclusa de gran entidad, mandada edificar por el duque Don Enrique en el úItimo tercio del s. XV. Originalmente pudo ser fachada del primitivo palacio de los Duques de Medina Sidonia o formar parte de la desaparecida Puerta del Mar, que se abría en las murallas medievales en esta zona. Se compone de una serie de arcos ojivales con gabletes entre los que se disponen una serie de extrañas figuras monstruosas cubiertas de doseletes en las cuales se sitúan diversas figuraciones de dragones. Las características del conjunto, con gran profusión decorativa, coinciden con las propias del gótico final. |