Su origen fue una fortaleza construida en el siglo XII y que formó parte de la línea fronteriza del reino nazarí de Granada. Desde sus muros partía la muralla que rodeaba la población. Conserva muros, torreones y torre del homenaje, aunque los elementos arquitectónicos que predominan son posteriores a la conquista cristiana (finales del siglo XIV) Se alza y adapta sobre una roca, de ahí su forma irregular, que lo sitúa en una mejor posición defensiva. Esta privilegiada situación la tuvieron que sufrir las tropas cristianas hasta que pudieron, tras un duro asedio, conquistar el castillo en 1327. |